In Derecho de Familia

Cuando se enfrenta a la pérdida de un ser querido, la incertidumbre sobre la existencia de un testamento puede añadir estrés y complicaciones adicionales a una situación ya difícil. En tales circunstancias, es crucial contar con la orientación y el apoyo de un abogado especializado en herencias sin testamento.

Este tipo de situaciones puede desencadenar conflictos familiares y disputas legales que podrían haberse evitado con una planificación adecuada. Es por ello que, ante la posibilidad de una herencia sin testamento, la asesoría legal se vuelve fundamental para garantizar una distribución justa y legal de los bienes del difunto.

En este artículo, exploramos los aspectos clave asociados a una sucesión intestada. Cómo abogados expertos podemos proporcionar la guía necesaria en este proceso, no dude en contactar con nosotros para un asesoramiento personalizado.

La sucesión intestada

La sucesión intestada, también conocida como sucesión legítima o ab intestato, según el Artículo 912 del Código Civil ocurre cuando:

  1. Cuando alguien fallece sin dejar un testamento válido, con un testamento nulo o que perdió su validez.
  2. Cuando el testamento no nombra a un heredero para todos los bienes o parte de ellos. En este caso, la sucesión legítima se aplica solo a los bienes no especificados en el testamento.
  3. Cuando no se cumple una condición establecida en el testamento, el heredero muere antes que el testador, o rechaza la herencia sin tener un sustituto y sin derecho a acrecer.
  4. Cuando el heredero nombrado no puede heredar por incapacidad.

Cómo puedo saber si existe un testamento

En situaciones de fallecimiento inesperado o cuando no mantenemos contacto frecuente con un familiar, puede resultar difícil determinar si existe un testamento.

Para averiguar si el fallecido ha dejado constancia de sus últimas voluntades testamentarias, es necesario consultar el Registro de Actos de Última Voluntad. En este registro se recopilan datos clave, como el nombre del testador, el lugar y la fecha de otorgamiento del testamento, así como el nombre del Notario que lo autorizó.

Es importante tener en cuenta que el registro no contiene el testamento en sí, pero sí registra cualquier modificación o actualización realizada a lo largo de la vida del testador.

Para obtener esta información, es necesario solicitar un Certificado de Actos de Última Voluntad al Registro correspondiente. Para realizar esta solicitud deben haber transcurrido aproximadamente 15 días después del fallecimiento. Este tiempo se otorga para permitir que cualquier testamento realizado poco antes del fallecimiento sea debidamente registrado por el Notario.

Si tras obtener el Certificado se confirma que no hay testamento registrado, se debe acudir al Notario para llevar a cabo una Declaración de Herederos. En este proceso, al menos uno de los herederos debe comparecer junto con dos testigos que conocieran al fallecido. El objetivo es determinar los herederos legales siguiendo el orden sucesorio establecido en el Código Civil.

La declaración de herederos

Cuando una persona fallece sin dejar testamento, aún es posible que sus herederos puedan recibir su herencia a través de una declaración de herederos. Esta declaración permite determinar quiénes son las personas que, por ley, tienen derecho a recibir una parte del legado del fallecido.

La declaración de herederos se lleva a cabo mediante un acta notarial, la cual debe realizarse en el lugar donde residía el fallecido, donde tenía la mayoría de su patrimonio, donde falleció o en un municipio cercano a alguno de estos. Cualquier persona que crea tener derecho a parte de la herencia puede iniciar este proceso, siguiendo un orden de prioridad que incluye a hijos, padres, cónyuge, hermanos, parientes colaterales y, en última instancia, al Estado.

Para hacer la declaración de herederos se requiere cierta documentación, como el certificado de defunción, el certificado de últimas voluntades, el libro de familia o los certificados de nacimiento y matrimonio. Además, se necesita la presencia de al menos dos testigos que no sean herederos. Una vez completado este proceso, será necesario aceptar la herencia y proceder al reparto de los bienes entre los herederos legítimos.

Cómo se reparte una herencia sin testamento

Una vez realizada la Declaración de Herederos, que hemos comentado en el apartado anterior, se debe esperar un período de 20 días para que el proceso se cierre de forma válida. El orden de preferencia para heredar por proximidad familiar es el siguiente: hijos, padres, hermanos, sobrinos y primos. Para verlo con más detalle, os dejamos el siguiente esquema:

  1. Primer lugar:
    • Heredan los hijos o descendientes del fallecido.
    • Los hijos heredan por cabeza y los nietos por estirpe, es decir en proporción a la parte que deberían recibir los padres, si vivieran.
    • El viudo o viuda tiene derecho al usufructo de un tercio de la herencia.
  2. Segundo lugar:
    • Si no hay descendientes, heredan los ascendientes del fallecido, padre o madre en partes iguales.
    • Si solo sobrevive uno de los padres, hereda la totalidad.
    • Si no hay padres, heredan los abuelos en partes iguales.
    • El viudo o viuda percibe un usufructo viudal equivalente a la mitad de la herencia.
  3. Tercer lugar:
    • Si no hay descendientes ni ascendientes, hereda el cónyuge viudo.
    • En algunas Comunidades Autónomas, también puede heredar el conviviente o pareja de hecho.
  4. Cuarto lugar:
    • Si no existen los anteriores, heredan los hermanos del fallecido en partes iguales.
    • Los sobrinos heredan por estirpe si el hermano fallecido no llegó a heredar.
  5. Quinto lugar:
    • Si no hay herederos en los puntos anteriores, la herencia va al Estado.
    • En algunas Comunidades Autónomas, la herencia va a la propia comunidad de residencia.

Con la Declaración de Herederos, se determina quiénes son los herederos legales, pero no se establece el reparto o adjudicación de bienes. Por lo tanto, los herederos deben ponerse de acuerdo sobre cómo distribuir los bienes de la herencia, que generalmente se divide de manera equitativa entre los herederos.

El reparto de los bienes puede ser por partes iguales o pro indivisos, dependiendo del tipo y valor de los bienes heredados. Es importante realizar valoraciones precisas y considerar las preferencias de cada heredero para evitar conflictos en el reparto.

Aunque es posible heredar bienes de una herencia sin testamento, recomendamos realizar un testamento para establecer con claridad la voluntad del fallecido sobre el reparto de su patrimonio y evitar posibles disputas entre los herederos.

Nulidad del testamento

El Código Civil no regula expresamente la nulidad del testamento, es decir no hay unas condiciones precisas para que sea declarado nulo. No obstante, como abogado podemos establecer casos claros en los que se entiende que, auqnue que exista testamento, no tiene validez. Las principales causas suelen ser:

  1. Falta de capacidad: El testador debe tener la capacidad legal para hacer un testamento. Si está bajo coacción, influencia indebida o incapacitado por enfermedad mental o física, el testamento puede ser nulo.
  2. Formalidades incorrectas: Las leyes requieren ciertas formalidades para los testamentos, como escribirlo y firmarlo ante dos testigos. Si estas normas no se siguen, el testamento puede ser nulo.
  3. Contenido ilegal: El contenido del testamento no puede ser contrario a la ley o a la moral. Si incluye disposiciones ilegales, el testamento puede ser nulo.
  4. Fraude: Si se obtuvo el testamento mediante fraude o engaño, puede ser nulo.
  5. Revocación: El testador puede revocar su testamento antes de morir. Si se presenta un testamento revocado como válido, puede ser nulo.

Es importante destacar que solo un juez puede declarar la nulidad de un testamento, y este proceso puede ser largo y costoso. Por eso, es fundamental asegurarse de que el testamento cumpla con todos los requisitos legales para evitar problemas futuros.

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